En la costa granadina hay un ecosistema propio y algunas de las poblaciones más importantes de la provincia. Allí se puede encontrar una gastronomía única y productos alimenticios de gran calidad como el pescado que se captura en sus costas, hortalizas frescas y sus frutas tropicales. Materia de primera calidad que para disfrutarlos en otras provincias se necesita de ser importada y que en Granada se suma a los productos que se pueden producir en el interior y transforma la provincia en un enclave ideal.
Pescado, hortalizas y frutas
Como se puede ver en los mercados, comercios y bares, la costa granadina disfruta y exporta pescados frescos de distintas clases y que forman un interesante escaparate: mero, corvina, pargo, besugo, sargo, congrio, herrera… La fama de preparar un pescado frito de calidad no es una falacia, con materia prima de excelente calidad y los experimentados cocineros que hay, se consiguen unos platos a gusto de todos.
El ecosistema propio de toda la costa permite que se trabajen una serie de frutas tropicales únicas en Europa y que convierte a las empresas que las producen ser las únicas en Europa capaz de venderlas. La chirimoya, el aguacate, mango, papaya, níspero, guayaba… son frutas muy características de la zona que los grandes restaurantes y clientes más exquisito ansían y que en la costa granadina se pueden comprar con facilidad.
Platos característicos
Con una materia prima de tal calidad, en la zona costera se pueden encontrar platos típicos muy distintos al del resto del país: ensalada de langostinos con mango, tarta de chirimoya, pollo al horno con hojas de aguacate, cazuela mohína, migas de sémola, espero de sardinas, sopa de pescada, papas con cazón y un largo etcétera que se suman a la característica fritura de pescado y parrillada de marisco.
Esta gastronomía sumada a la propia de la capital o la de La Alpujarra completan un abanico gastronómico y exportador de alimentos único.
